jueves, junio 29, 2006
Boyero is the fucking king
Tengo pendiente una entrada que le debo a Impe, pero teniendo en cuenta que son las 1:34 y estoy escribiendo una conferencia que lleva tres días tarde en su entrega, pues como que no toca. Ya llegará.Pero tengo la tele de fondo y he tenido que oír a Boyero en una de las suyas: "Yo no insulto, defino".
Me voy a hacer una camiseta con eso como las del Torbe. Pero que huevos más gordos tiene el jodío cara picada.
jueves, junio 08, 2006
Miedo al Miedo
Gracias a esto, estoy pasando una etapa South Park total. Como quiera que todos mis amigos a los que todavía le dirijo la palabra son todos fans, no voy a insistir en el asunto, pero voy a darle un pequeño twist.
Sirva esta entrada como pequeño agradecimiento y descubierta de chapeo a toda esa gente que nos hace la vida feliz, y que pasan y desaparecen entre el desconocimiento general. Y que sirva como recordatorio y advertencia de aquello tan cierto de que solamente hay que tenerle miedo al miedo.
Esta entrada es un homenaje a Mary Kay Bergman. May your red-fire hair burn forever.
martes, junio 06, 2006
Cadena Literaria
Joder, Rapun, que responsabilidad...
Ahí van:
Vidas valerosas, Cleodie Mckinnon,de la Biblioteca Juvenil Oxford, de 1969.
Mi primer contacto con Leónidas, Kate Barlass, Flora McDonald, Alexander Nevski y el resto de los cojones cuadrados que en el mundo han sido. 'Nuff Said. La edición está más que agotada y no he encontrado una puta imagen en Internet, he tenido que escanear la portada.
Cualquier revista de Bruguera, circa 1974.
Estas aparentes chorradas me convirtieron, a mis tiernos tres años, en lector compulsivo para siempre jamás. Gente como Ibáñez, by Vázquez, Martz Schmidt, Escobar... me han influenciado tanto o más que mi educación tradicional. Y las he disfrutado tanto como cuando he leído "Guerra y Paz" o "Las uvas de la ira". Vale ya de papanatismos. ¡Mas respeto por los tebeos!
Brian Lane, «Los carniceros. Una antología de crímenes macabros e investigación forense», Madrid: Valdemar, 1991
No es el primero, ni es el mejor, y Stephen King y Clive Barker ya habían empezado a corromperme. Pero este libro volvió mis sesos mierda y todavía los tengo así. Y lo que es peor, no tengo el más mínimo interés en volver a la normalidad.
Como cualquiera un poco avispado podrá observar, mi criterio ha sido simplemente el impacto que me causaron, no intenta ser una recomendación para nadie.
Le paso la bola a Cassandra y Hari Seldon. porque sí, porque hoy es hoy.
