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lunes, diciembre 27, 2004

Vino y Guitarras 

No, no es que vaya a convertir ahora a C.E. en una secta de adoradores de Manolo Escobar. He tenido una interesante charla con un consocio de secta sobre vino y guitarras que me ha hecho reflexionar sobre la condición humana. Ya sé, ya sé, es un defecto que me debería hacer mirar.

Cuando son cursivas es que le estoy citando:

“ […] De rock entiendo un poco más,
porque he escuchado mucho. En eso se lo que me gusta y lo que no, pero como
no sé nada de solfeo, ni toco ningún instrumento, no sabría distinguir una
Stratocaster de una Gibson-Les-Paul”


Yngwie dice que le gusta la Strato porque suenan todas las notas. Esto que parece una gilipollez, no lo es en absoluto. Cuando usas una guitarra rockera, utilizas una determinada distorsión. La distorsión le da fuerza y potencia, pero acumula armónicos y otros efectos colaterales no deseados que hace que la mayor parte de la gente reduzca

Conclusión: Un acorde mayor (1ª - 3ª - 5º), que en una guitarra acústica suena con cuerpo y limpio, suena a batiburrillo informe en una guitarra eléctrica fuertemente distorsionada. Lo que hace que en muchas ocasiones se elimine la tercera, quedando el power chord (1ª - 5ª) como la base del rock. Esto es tan importante como que condiciona la manera de tocar de un músico: Yo como solo tengo dos posiciones de tocar (heavy y más heavy) me he desentendido por completo de los acordes abiertos, y tengo muchas limitaciones cuando me toca tocar una guitarra acústica, por ejemplo. Gorpik puede dar fe de ello.

Luego podía enrollarme con la diferencia entre pastillas simples y humbuckers, el peso, la madera, la palanca... En un entorno "Guitars for dummies" La diferencia entre una Strato y una Les Paul viene a ser que la Strato es más versátil y tiene un sonido característico al seleccionar conjuntamente las pastillas intermedia y del puente, la Les Paul es más rockera y tiene más cuerpo.

Erase un hombre a una Strato pegado...

[...] En música importa el entrenamiento, y como hayas desarrollado tu gusto, pero también importa que tengas buen oido, si no lo tienes ya puedes hacer todo el solfeo que quieras.

A lo que voy: En el vino, en la música, en lo que sea, lo que te hace decidir entre una cosa u otra, cuando no median criterios puramente estéticos, es el conocimiento en profundidad de una determinada materia que viene aparejado con la práctica. Eso te hace más claro que es lo que quieres y que es lo que no, y termina por determinarte tus gustos y desarrollar las preferencias sibaritas. Pero siempre desde el susodicho conocimiento+práctica. Del entrenamiento, como lo denomina el.

El problema es que una vez que conoces un tema en profundidad, las diferencias entre algo bueno y algo muy bueno suelen ser nimias, y de ahí a lo excelente hay muy poca distancia. Es necesario dedicar muchas horas y mucho esfuerzo para realmente apreciar las sutiles diferencias (que las hay) en el extremo superior, mientras que son relativamente pocas las necesarias para conocer los rudimentos. La progresión de aprendizaje se ralentiza terriblemente cuando ya conoces lo más significativo.

El problema con el vino es que tu te vas a encontrar pocas veces subido a un escenario con una guitarra entre las manos, pero vas a cenar en restaurantes serios muchas veces. Y entonces viene el problema, que es cuando pretendes tener un conocimiento sobre algo de lo que no tienes ni puta idea. Hay más gilipollas en el tema del vino que en el de las guitarras simplemente porque hay más oportunidades de exhibir gilipollez.

Y todo esto conecta con todo lo que decía Rapun en su blog: Tu quieres fardar de entendido delante de tus amigos, chaval. Te suda la polla el saber de vinos.

"[...] Pues lo mismo con el vino. Se lo que me gusta y lo que no, y el paladar lo he hecho a base de probar y decidir lo que me gusta más, pero no tengo ningún entrenamiento formal o teoríco. Empecé a tomar vino con cierta frecuencia hace unos 10 años, cuando empecé a trabajar. Se empieza con Marques de Cáceres, Cune, Viña Mayor o similares (6 a 9 euros botella, crianza). Y al principio no se distingue un crianza de un reserva, y te preguntas como puede haber gente que pague el tres o cuatro veces más por lo mismo.

Después de un tiempo vas pillando los matices, y ya te gusta más el reserva (9 a 15 euros la botella) y vas probando otras marcas, cosechas, grandes reservas, etc. Hasta que al final descubres que ya no te gusta el Marques de Cáceres crianza, ni a 6 euros ni aunque te lo regalen, que prefieres pagar tres veces mas por un Matarromera, y disfrutarlo.

En ese punto estoy con mi gusto: Marqués de Cáceres Gran reserva del 95 (el 95 fue cosecha excelente en Rioja), Cune Imperial, Matarromera Reserva, Viña Pomal, Muga Reserva, Azpilicueta Gran Reserva y similares."


Este es un proceso ejemplar de como uno realmente se hace experto: Ni libros, ni educación en las mejores escuelas, ni hostias. Ganas. Drive, que dicen los ingleses. Y tu talento natural te dirá si vas rápido o lento. Por cierto, uno de mis pajaritos me ha dicho que van a declarar el 2001 excelente en Rioja. Haced acopio antes de que lo hagan los listos.

"[...] Entre 15 y 20 euros, son los vinos que compro para tomar en casa un día normal. De vez en cuando me descuelgo con un Gran reserva de Viña Pomal, Viña Tondonia, o el reserva Pesquera que me estoy tomando ahora (25-35 euros) y desde luego que se distingue la diferencia y me gustan más, pero ya no tanto como para que
me compense tomarlos todos los días.

Las tres o cuatro veces que he probado vinos mejores que eso, como el Valbuena 5º año, también se distingue la diferencia. El Valbuena estaba de miedo, pero cuesta el doble que el Pesquera, no merece la pena para la diferencia que le noto. Lo que ya no se es si llegaré a refinar mi paladar tanto, o he llegado al límite de mi capacidad. Tengo que entrenarme un poco más en el rango 30-45. Pero no dudo de que haya gente que si sepa distinguir la diferencia, y a la que le merezca la pena pagar el precio."


Y por fin, el broche final: El saber que el lujo, la exquisitez, ni te lo puedes permitir todos los días ni aunque lo pudieras, te interesa ejercerlo ¿Que te queda después? ¿Que puede pedirle a la vida el niñato de los Beckham, después de que te regalen un Hummer en miniatura de a 30,000 € para Reyes?. Y el saber que bajar de los 9,90 en los 100 m. lisos, o saltar un centímetro por encima de 2,42 te cuesta tres veces más esfuerzo que saltar de 2,30 a 2,42.

En resumen: Dame alguien motivado para los hobbies y disciplinado para las cosas profesionales. Y si se juntan las dos cosas, dejad paso a esa persona porque de ella es la tierra y todo lo que en ella habita.

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martes, diciembre 21, 2004

A ti, lector inteligente... 

... te lanzo una serie de preguntas que asolan mi alma:

A) ¿Que hace que cada vez que miro una de mis series favoritas, CSI, me entren unas ganas irrefrenables de hostiar a Horatio Caine hasta que me rompa el semilunar, el piramidal y el pisiforme de ambas manos? ¿Será la posturita con los brazos en jarras y los nardos apoyaos en la cadera? ¿Será el tonito de voz que surge del hecho de que de cada tres frases que pronuncia, una tenga que ser lapidaria? ¿Será las ensación que tengo de que tiene el sentido del humor y de la ironía en la costura del escroto? ¿Será el puto pelo de gilipollas amanerado que tiene? ¿El gesto de las gafitas de sol?

A tomar por el culo os podeis ir todos

B) ¿Que hace que Calleigh Duchesne me parezca tan plana como una platija? ¿Que hace que piense que lo que sabe de balística lo ha visto en videos de Barrio Sésamo? ¿Por qué pienso que duerme por las noches con su osito de peluche? ¿Por qué, a pesar de lo buena que está, me da el mismo morbo que la Duquesa de Alba?

C) ¿Que me hace sentir que Eric Delektorsky es un cubano de pastel, o tal y como creen los yankis que son los cubanos? ¿Por qué si eres latino tienes que estar buenorro y follar como un león? ¿Por qué tiene que parecer imbécil y necesitar de los insights de sus amigos WASP?

D) ¿Por qué, oh dioses, me dan ganas de gritarles a pleno pulmón que me suda la polla su puta vida y que se aparten que no me dejan ver la trayectoria de la bala? ¿Por qué nadie entiende que tan importante como la ciencia forense es construir personajes sólidos y creíbles? ¿Quien aprueba los guiones? ¿Por qué con los mismos ingredientes uno hace una mousse que te corres vivo y otro agria la nata? ¿Por qué? ¿Por qué?

¡Chejov, resucita y mátalos a todos a patadas en los dientes!

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domingo, diciembre 19, 2004

Ya, Samaniego. ¿Pero cual? 

Esta:

LOS NAVEGANTES

Lloraban unos tristes pasajeros
viendo su pobre nave, combatida
de recias olas y vientos fieros,
ya casi sumergida,
cuando súbitamente
el viento calma, el cielo serena,
y la afligida gente
convierte el risa la pasada pena.
Más el piloto estuvo muy sereno
tanto en la tempestad como en bonanza.

Pues sabe que lo malo y que lo bueno
está sujeto a súbita mudanza.


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Hanafuda 

Pido perdón a mis lectores habituales (Que los cuento con los dedos de la mano y me sobran dedos) mis prolongadas ausencias. No es que no tenga nada que decir, es simplemente que no hay manera de tener tiempo de sentarme a escribirlas. Y el listón está muy alto (Ultimamente Rapunzell se ha unido al siempre prolífico Impe en producir buen material, eso por no mencionar a Gorpik, Athair, Tindriel y los demás) como para meter mierda por meter.

El Hanafuda es un juego de cartas japonés, que evolucionó a partir de las cartas occcidentales, introducidas por los holandeses en Japón a partir del siglo XVI.

Lucky deal, hopefully!!!

También fue lo primero a lo que se dedicó la todopoderosa Nintendo antes de encontrar su camino y la fortuna en los videojuegos, gracias a una serie de coincidencias no controladas

¿A que viene esto? A lo que ahora me ocupa la cabeza. Después de trabajar durante tres años en sacar adelante mi compañía, y cuando estamos a punto de triunfar a lo bestia, nos encontramos en la enésima crisis, con un socio crítico que quiere irse. No tiene razón en lo que plantea, y no voy a poner la empresa en riesgo para satisfacerle. Pero su marcha nos haría polvo, amén de que le aprecio personalmente porque hemos batallado juntos mucho.

Y la verdad, lo que me ha dado la vida es perspectiva. Empecé de IT puro, he acumulado mucha experiencia en el otro extremo de la baraja (¡Marketing!) y a lo mejor me hago rico vendiendo ostras. Who fuckin' knows.

Es cuestión de no desfallecer, descorazonarse ni rendirse. Esta situación me hubiera destrozado hace diez años, me hubiera quitado el sueño hace cinco. He dormido al ladito de Lady Napalm, como un bebé.

Tengo cabeza y ganas de trabajar. No es una garantía de nada, pero es lo único que nunca me va a fallar. Y mi familia y yo saldremos adelante.

Tiempo de volver a Kipling. O más cerca, a Samaniego.

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jueves, diciembre 09, 2004

Eros y Thanatos (II of n) 

Está visto que no puedo tener satisfacciones completas.

Si bien el concierto de los Pelafustanes fue un obús nuclear, me tocó volverme antes de lo que hubiera querido por una conjunción de eventos desgraciados.

Y de postre, Xevi, el batera nos deja al terminar el concierto por imposibilidad física total de continuar.

Para los que no conozcáis a Xevi, es posiblemente la mejor persona del accidente feliz que son los Pelafustanes, que increíblemente junta a más de media docena de las mejores y más interesantes personas que he conocido en mi larga y próspera vida, que diría el otro.

No sólo fue cocreador del nick de Capitan Napalm, sino que era capaz de a pesar de que iba reventado a la RAM, con las canciones cogidas con alfileres, con la guitarra cayéndoseme de las manos y la cabeza hecha natillas de las densas, de hacerme descojonarme no menos de tres o cuatro veces cada cuarto de hora, con regularidad digna de un docto proctomante.

Other bands play, Pelafusteins kill!!!


Hijo del Trueno, eres un Hijo de Puta. Me has partido el corazón.

Y Bisbal, ni décimas de fiebre.

Me cago en todo lo que se menea.

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jueves, diciembre 02, 2004

Un post extra para hoy 

No lo he podido evitar, hoy dos posts:

Jordi Bianciotto es un periodista musical que yo conozco de varios libros y artículos publicados en Popular 1, una revista de guaquenroul para peluts que fet soroll como el menda lerenda.

Si le traigo aquí a la mesa, es porque ha creado un blog de crítica de discos muy curioso.

La mayor parte de las críticas son el sobrarse por el sobrarse, pero le traigo aquí a la palestra porque la crítica que hace del disco de Andy y Lucas, uno de mis últimos objetivos en la modalidad vuelo stuka rasante, es inmejorable lo miréis por donde lo miréis.

Ea, ya está. Combustión enseña, conbustión entretiene y hasta la pasada rasante que viene.

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Testosterona y lágrimas 

Vaya mezcla para un cocktail, ¿no?

Pero es que últimamente tengo la sensación de que son cosas que vienen de la mano.

La tradición judeocristiana nos dice que llorar es de mujerucas y que los hombres no lloran. Y que las mujeres, por ende, son frágiles libélulas que han de retirarse a hablar de trapitos cuando los hombres fuman puros en el salón después de comer. Mierda en frasco, hermanos.

Lady Napalm es una mujer muy, muy sensible. Le dan mucha pena los viejecitos, las historias de amor, la gente que se muere, es particularmente sensible a los temas religiosos, y de los momentos más maravillosos que disfruto con ella es cuando nos ponemos a llorar juntos viendo una película que nos toque. Las últimas fueron "La pasión" y "Big Fish" en DVD, que se nos murió el palomo de puro llorar en el sofá abrazaditos.

Cuando Lady Napalm se va a Ginebra o a cualquier otra parte del mundo a trabajar, escucho la SER en la radio que tenemos al lado de la cama. Por pura desintoxicación, por irme al otro lado del espectro manipulador y porque escucho "El Larguero" desde que eramos 300,000 oyentes (El de la Morena es otro que espero que se de cuenta de que lo único que le salva es que no se separa del rollo de paleto de Brunete que es lo que le impide Gabilondizarse del todo).

Cuando me voy a la cama me cojo un libro y conecto la radio, y dependiendo de lo cansado que esté, cuando dejo el libro, la radio sigue y escucho a veces un programa que se llama "Hablar por hablar".

Generalmente la gente que llama me da vergüenza ajena, pero ayer escuché una historia tan conmovedora que no pude dejar de llorar en silencio durante un rato. Es muy reconfortante el sentir las lágrimas calentitas saliendo de los ojos, trazar una elegante curva en el moflete e ir a caer, ora en la comisura de los labios, ora al lateral de la mandíbula. Por lo general ni me las seco ni me las escondo (a no ser que no vea porque esté anegado en lágrimas), para mí son como trofeos de guerra.

Y encima aquí sale Tracii Lords

Sin embargo, a una negociación me llevo a Lady Napalm any day. No he visto nadie más duro, chungo, agresivo, asertivo y sin pelos en la lengua que mi mujer en medio de una negociación. Y le importa tres pepinos quien tenga delante. Y donde haya huevos, ella tiene un puesto.

Y cualquiera de vosotros que me conozca, sabe que no soy precisamente un lilium blanco. Mi idea de la sutileza es Jackyl tocando " The Lumberjack" en pelotas con la sierra eléctrica en la mano.

Esta es mi idea de un cantautor

¿Hipócritas? ¿Bipolares? No, humanos. Y cada cosa en su tiempo y los nabos en Adviento.

Anaxágoras, tío, después de lo que dijiste, yo tengo poco que añadir. Que bien sienta sentirse humano, para lo bueno y para lo malo.

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