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miércoles, septiembre 29, 2004

My mission 

Acabo de llegar de Barcelona (Sorry por la facción Pela, pero no tuve ninguna oportunidad de hacer nada), donde me ha tocado trabajar como un leñador durante dos días y medio. Gajes del oficio. Y antes de meterme en otra reunion aqui en Madrid, un post provocado.

Provocado porque llevo desde Barcelona con una cancion repiqueteandome en la cabeza: "The Mission", de Queensrÿche. De su disco conceptual "Operation: Mindcrime", un disco al que postrarse y adorarlo apenas le haria justicia.

De putas rodillas!

Casi me habia olvidado de este disco, casi sin ninguna duda, mi preferido DE TODA LA PUTA VIDA. No estoy diciendo una boutàde, es la verdad. Ha permanecido silente en mi cabeza, como los monstruos de Lovecraft, hasta que una conjuncion de cosas lo han despertado. Por un lado, Imperator, que accidentalmente me puso el disco el otro día en su casa, parece ser que se habia bajado la discografia de los 'Ryche sin saber que estaba manejando entre ellos el disco de la bestia. Y por otro, el hecho de que ahora, me siento realmente "a man with a mission", en mi vida privada y en la profesional.

Waiting for days longer
'til sister comes to wash my sins away
She is the lady that can ease my sorrow
My love for her
Will help me find my way


Siempre he pensado que la gente que realmente hace cosas geniales son gente obsesionada de manera enfermiza. Mozart, Beethoven, Ramon y Cajal, Van Gogh... Obviamente no llego a la altura necesaria para limpiarles el culo a ninguno de ellos, pero... siento esa sensacion de tener una misión que cumplir que no debe ser muy distinta de las que tuvieron ellos. Me arden las tripas. Mis objetivos personales y profesionales me llenan la cabeza, y pasare por encima del cadaver del diablo para conseguirlos.

My mission saved the world
And I stood proud
My mission changed the world
It turned my life around


Cierro los ojos y oigo ese riff de guitarras que suenan como contrabajos llorosos, que me susurran que a pesar de todos los problemas, los sinsabores y las dificultades, si tienes claro tu objetivo, se puede triunfar (no, esa no es la palabra adecuada... quizas tangibilizar tus sueños, por locos que sean...) si tienes una mision encomendada que cumplir y te pones a ello con fervor religioso. O dos misiones, una en casa y otra en el trabajo. Y, asi, casi quince años despues de la primera vez que oi este disco, cuando iba en autobús a la facultad desde el trabajo y regresaba a las tantas de la noche sin el menor cansancio (benditos dieciocho), de nuevo, vuelve a acompañarme su sonido cuando mas lo necesito.

My mission... Me pregunto cuantas personas de las pocas que leen este blog tienen una mision en la vida. Y de hecho, si la necesitan. Me recuerda al chiste aquel de Gary Larson: "Finally, Freddie find his purpose under a coach"





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martes, septiembre 21, 2004

Bon Jovi no es solo Jon 

Este bello aforismo, amén de ser una de las perlas de la colección de pintadas callejeras estrambóticas que acumulan mis amigos Gorpik y Rapun, es de una dimensión tal, que me hizo reflexionar el otro día sobre una serie de cosas.

Los que ya me conocéis sabéis que mis gustos musicales son más bien en plan pantalón de cuero marcando paquete, tachas y melenas al viento. Sin embargo, no tengo ningún problema en reconocer que en su momento fui muy, muy fan de Bon Jovi.

This record rocks!

Coloquémonos en perspectiva: 1987, yo soy un joven plenamente hormonado y aparecen estos chavales, después de dos prometedores discos (Runaway y 7800º Fahrenheit) con un discazo que lo crujes (Slippery when wet) con canciones hechas para rockear, una imagen de muerte y tien-nas baladas para bailar apretando la cebolleta con tu tigresa del metal. Por no mencionar que los videos los ponían en la tele pública, que entonces no había MTV.

Todos conoceis la historia que viene después: Jonito se convirtió en un ídolo de masas, le dieron varios egotrips de lujo (Que el número 1 en todo el mundo de Blaze of Glory, su disco en solitario para la banda sonora de Young Guns III, no ayudó a disipar) y Bon Jovi como grupo comenzaron a dar bandazos, y el ratio canciones roqueras:canciones babosas pasó a ser de 1:7. En resumen, que en lo que a mi respecta y a día de hoy, como si le operan y no le cosen.

Luego me fijé en Ritchie Sambora, y en particular en directo. No se si los fuisteis a ver al Calderón, pero el tema era peripatético. Jonito tiene una voz muy bonita y característica, pero no tiene ni puta idea de cantar profesionalmente, con lo que a la tercera canción, se le ha ido la voz. ¿Quién le soporta? Ritchie, que tiene una voz de puta madre, le salva la vida doblándole en más de la mitad de las canciones, y hace coros que te mueres, por no mencionar que toca su Strato como un titán.

En otras áreas de la vida, mi Ritchie también es el puto amo. Sacó tres discos en solitario que se mean en la cara en cuanto a rockerío a los de Jonito y le levantó la mujer a Tommy Lee, de los Mötley Crüe (Dedicaré otra entrada de blog completa a estos salvajes otro día). Nada más y nada menos que la preciosa Heather Locklear, a la que preñó a toda velocidad mientras que el Lee no pudo convencerla de tener hijos.

La chorba de Ritchie, en una foto muy 80's

La moraleja, amiguetes: Hay gente que brilla y se quema, y hay gente que hace las cosas con perfil bajo, pero picando como un campeón. Y cuando te das cuenta de adonde llegan sin armar bulla, te quedas sorprendido.

Por cierto, esta reflexión también sirve para la gente que pertenece a un grupo y no entiende que la fuerza está ahí, en el grupo. Muchos grupos de gente (grupos musicales, de amiguetes, de trabajo…) se disuelven en batallas de egos, con el consiguiente desperdicio de energía, tiempo, esfuerzo y talento.

Y lo peor es que aunque quieras con todas tus fuerzas ser líder, si no lo eres de manera natural eres carne de cañón. Mi socio vasco resume el tema perfectamente: Un líder no se autoproclama, lo elige la gente espontáneamente. Me descojono de las clases de liderazgo que se dan en algunos MBAs y escuelas de negocio en las que doy clase. Lo que natura non dat uber pastavit non prestat.

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lunes, septiembre 13, 2004

Stay Hungry 

Beware of the biting wolf!

Lady Napalm, que de R'n'R no tiene ni puñetera idea, pero que es la persona más intuitiva que conozco, me alegró ayer el día un poco más de lo que en ella es habitual (and I am really saying something!). Después de una boda criminal que tuvimos en Lugo, pensó que la tarde perfecta era tocarnos las pelotas viendo tres pelis de DVD seguidas. Cualquiera que me conozca, se habrá percatado que esa es mi idea de pasarme una tarde perfecta tanto como si me grapan el escroto a una pared, y manifesté mi opinión a base de ponerme hosco y acompañarla al videoclub con cara de resignación, cosa que a la susodicha le importó un pepino, porque tenía un plan.

El caso es que me puso una película llamada "Escuela de Rock". Y me alegró la tarde.

El gordo es un crack

Como os la explicaría a los que no la hayáis visto... Es una película lo suficientemente gilipollas como para gustarle a los niños y lo suficientemente cabrona en ocasiones como para que les guste a los adultos.

Yo, me sorprendí en ocasiones identificando los riffs que tocaban, y descojonándome con detalles como cuando les enseña a los niños en la pizarra toda la taxonomía rockera con diagramas explicativos.

Y obviamente, la película en cierto modo es una gilipollez monumental que explota lo que yo llamo "patrón Karate Kid" consistente en

a) Personaje perdedor que da buen rollo
b) Presentación de los malos y el mal rollo de su vida
c) Oportunidad de mejorar en la vida por medio de cualquier cosa insospechada
d) Mejora progresiva que te genera expectativas
e) Cagadón que te mueres y todo a la mierda
f) Rollo de libro de autoayuda sobre creer en ti y en el tamaño de tus cojones
g) Salvados por la campana en situación chunguísima y triunfo en las fauces de la muerte
h) créditos finales con música de Survivor (Manowar podrían servir también)

Y la gente a la calle, a dar patadas al aire, bailar como Billy Elliott o hacer air guitar, la cosa es indistinta...el caso es pensar que hoy me han dado por el culo, pero mañana será otro día, y quizás tenga suerte esta vez y me coma algo más que los mocos.

Sin embargo, esta peli es distinta... Si recordáis, en su momento os hablé de "Rockstar", otra peli que me llamó la atención, pero que el final era de vomitar. Me molaba el tema de plantear todos los topicazos del heavy metal, pero el final era totalmente anticlimático, con el personaje que hacía de rockero vendiéndose por un plato de lentejas.

En esta otra... la verdad es que la peli no te la puedes creer, pero hay algo... Puede que sea el talento de Jack Black (que a mi juicio se mea en la cara de Jim Carrey), el hecho de que los niños toquen de verdad (Por lo visto hubo 20,000 en las audiciones), el hecho de que el tío es un rockero de cojones y vive y muere con su rockería y sus delirios de grandeza, a pesar de ser más malo que el sebo, y no como el panoli de su amigo (Que en realidad es Mike White, el autor del guión) que dejó de ser bajista, se dedicó a la vida seria y su novia le da por el culo lo que no está en los papeles..., la niña cabrona que hace de Manager de la Banda, que es mi papel favorito de lejos... No lo sé, el caso es que me pasé un muy buen rato viendo una película, y eso no es muy normal en mí.

Yo creo, y conectando con algo que decía Rapun en su blog, que lo que pasa es que el aire huele a ozono, amiguetes. Y es que quiero rock, me quema la sangre la falta de rock. Me gustaría que copara las radios, la tele, que le hicieran la picana a Bisbal y la sierra española a Isabel Pantoja, y estrellar un camión lleno de Tytadine sobre la caseta donde están los Siempre Así en la feria de Sevilla. Me apetece subirme al escenario con los Pelafustanes y quemar el escenario. Tengo hambre, amigos, tengo hambre de Rock'n'roll!!!

Let's get out and melt some faces!!!!

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lunes, septiembre 06, 2004

Malditismo [Dedicado a Hari Seldon] 

De los posts de Hari ha salido esta chorrada. Va por ti,tigre.

Me caen bien los malditos. Quiero decir, desgraciadamente, soy demasiado consciente de que el malditismo como postura suele llevar al hambre, las privaciones, la demencia y la muerte joven. Pero también lo soy que ha hecho mucho más por el mundo Van Gogh (O Kurt Cobain) que Edelmiro Puchades, funcionario de correos que murió plácidamente rodeado de su familia a los 91 años.

Y ese malditismo siempre ha fascinado a la gente con más inquietudes estéticas y sociales, los más inconformistas y sensibles. Gente como Ray Loriga y Mañas son gentecilla que a mi juicio ha leido demasiado Baudelaire para su propio bien, pero que conectan mucho con jóvenes inteligentes con problemas de adaptación a lo penoso que es el mundo si lo miras con cuentahilos (Bueno, en realidad con un vistazo superficial es más que evidente).

Y en mi reivindicación de hoy, dos malditas, una de ellas muerta. No se jalaron un rosco en su puta vida, y el más absoluto fracaso comercial durante treinta años fue el culpable de que hicieran muy pocos discos. A alguno de vosotros a lo mejor os suenan por algun microéxito en un mar de fracaso, pero no conozco a nadie que haya escrito una canción la mitad de ponzoñosa que esta, que yo sepa. O algo tan bonito, elegante y nostálgico como esto. O cualquier otro de los cien caramelos de limón que nos dejaron.

Heliotropo

Va por vosotras, maestras.

Pelafustanes todos, a coro: "Y Bisbal, ni un mal resfriado..."

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